Los antiguos rótulos de bares y establecimientos históricos que adornan las calles de Santiago, ofrecen un espectáculo que a menudo pasa desapercibido para los transeúntes. Estos carteles, que datan del siglo pasado, no solo son testimonios de la historia local, sino que también poseen un valor artístico particular que refleja la esencia de la ciudad.

Aldara Cidrás, historiadora de nacimiento en Vigo y ‘picheleira’ por adopción debido a su profundo afecto por la capital gallega, es la autora de un proyecto llamado «Compostela (etno)gráfica». Este proyecto tiene como objetivo preservar y dar a conocer este patrimonio, que a menudo corre el riesgo de desaparecer debido al cierre de tiendas y negocios históricos. Cidrás ha destacado que a pesar de las regulaciones municipales que protegen la arquitectura de la ciudad, estos rótulos no están protegidos de manera específica, lo que pone en peligro su supervivencia.

Para llevar a cabo su proyecto, Cidrás se ha sumergido en un enfoque práctico, recorriendo el casco antiguo de Santiago y catalogando meticulosamente los rótulos históricos. Esta labor se ha convertido en una cuenta de Instagram (@compostela_etnografica), que se ha convertido en un repositorio valioso para preservar estas piezas.

Pero el alcance de «Compostela (etno)gráfica» va más allá. El proyecto ha recibido un fuerte impulso gracias a una beca de la Diputación Provincial de La Coruña y a su participación en un programa de residencia de investigación en el Museo Reina Sofía de Madrid. En este museo, se ha presentado una exposición que muestra los rótulos de Compostela, permitiendo que estos viajen a la capital de España y se exhiban al público.

El proyecto de Cidrás no se limita a la inmortalización de rótulos existentes, también está comprometido en la investigación y documentación de señales que ya han desaparecido. Para lograr esto, ha establecido una dirección de correo electrónico ( etnograficacompostela@gmail.com ) para que el público en general pueda contribuir con información sobre lugares antiguos y recuerdos que puedan ser útiles en su investigación.

El objetivo a largo plazo de esta iniciativa es consolidar una investigación sobre la genealogía gráfica comercial en Santiago durante el siglo XX y servir como recurso para futuros estudios socioculturales. Cidrás espera que su trabajo también inspire a otras ciudades europeas con un patrimonio similar a considerar la señalización como un bien valioso digno de protección y preservación. El proyecto representa un esfuerzo conjunto por parte de la comunidad para «proteger y revitalizar» este «museo en la calle», como lo ha expresado la diseñadora Enric Satué. El futuro dirá si esta iniciativa logra consolidarse, pero hasta ahora, las perspectivas son prometedoras para «Compostela (etno)gráfica».